viernes, 16 de septiembre de 2005

NOTICIAS DE BARCELONA: A PAGAR POR DEJAR EL COCHE EN LA CALLE

La zona verde se extiende por Barcelona como mancha de aceite. A partir del 24 de octubre el Ayuntamiento de Barcelona pondrá en marcha la llamada “segunda fase del área verde”, eufemismo que se traduce lisa y llanamente en algo muy prosaico: sacarle más dinero a los ciudadanos.

La fase de marras significa que los ciudadanos que viven en el enorme espacio delimitado por la Ronda del Mig, Gran Vía de les Corts Catalanes, Tarragona y Josep Tarradelles, habrán de pagar por aparcar sus vehículos en la vía pública. La tercera y última fase está prevista para el 14 de noviembre.

Tras culminar la implantación del área verde, ya no será posible aparcar en las calles de Barcelona sin pagar una tasa en el inmenso espacio que comprende desde la Ronda del Mig hasta el mar.

A partir de ahora, los ciudadanos interesados habrán de solicitar el distintivo acreditativo de que son residentes en la zona. Los precios que se han fijado no son desmesurados. Vienen a rondar 54 euros al año.

No es mucho, pero se trata de un impuesto más, que quedará férreamente implantado de por vida, porque los impuestos se crean con facilidad, pero luego ya no hay forma humana de derogarlos y extirparlos.

En definitiva, ahora habrá que pagar por una cosa que antes era gratuita en muchas calles de la ciudad. Además, la feligresía tiene que abonar la mordida, pero el Ayuntamiento no garantiza que los conductores paganos vayan a encontrar un sitio donde dejar el coche.

EL ÁREA VERDE GARANTIZA “LA BUENA CONVIVENCIA”, SEGÚN EL AYUNTAMIENTO

Como es habitual, el aguerrido aparato de agitación, propaganda y autobombo que rodea a Joan Clos, ha vendido la impopular medida como si hiciese un favor a los ciudadanos. Estos días, el Consistorio anda repartiendo unos folletos informativos en los que explica sin rubor que las áreas verdes sirven para “fomentar y garantizar el derecho a la movilidad de todos”.

No sólo eso. Además, nos recuerda que “desde el Ayuntamiento cada día trabajamos para mantener este firme compromiso, impulsando medidas que aseguren la buena convivencia”.

La verdad es que semeja un tanto peregrino calificar de “firme compromiso por la buena convivencia” la instauración de un impuesto revolucionario a una innumerable legión de vecinos.

En su inmensa mayoría, vienen dejando su vehículo en la calle por la sencilla razón de que no disponen de recursos suficientes para adquirir alguna de las escasas y carísimas plazas de estacionamiento que hay en oferta.

1 comentario:

Anónimo dijo...

LAS AREAS VERDES Y LA GLOBALIZACION.

Quizás penseis que este título tenga una cierta contradicción, trataré de esplicarme.
Me refiero a la globalización intelectual que ya hace tiempo que hemos instaurado en nuestra global sociedad.
Como entes individuales, ya no nos sentimos comodos con nuestra mediocridad y aspiramos a ser todos iguales lo que implica declarar la guerra a las personas que muestran ciertas diferencias co el rebaño como serían la inteligencia, la originalidad o la preparación profesional.
Una de las consecuencias de esta actitud, es que nuestros políticos pertenecen también al rebaño y los que podrían estar fuera aprenden a no salir. Así que no nos quejemos de las áreas verdes porque nosotros hemos escogido que así sea y no me vengais diciendo que vosotros sois diferentes porque no es verdad.

Ahí or dejo el comentario por si alguien del rbaño quiere contestar.