- Las extrínsecas que dan a los individuos un reconocimiento personal en frente de otros (la amistad, reputación, autoridad sobre los hijos, etc...)
- Las transcendentales que son las que mueven a realizar acciones por una causa justa donde no exista el egoísmo (pertenecer a organizaciones altruistas, creer y ser consecuente con los principios, la religión, etc....)
miércoles, 26 de julio de 2006
jueves, 13 de julio de 2006
Como que veo que este tema de las relaciones de pareja sigue suscitando interés y debate entre mis "lectores" he decidido publicar un nuevo post sobre la cuestión. Aunque los postulados generales son muy básicos, espero que sepais encontrar algunas claves que os lleven a la reflexión, y si es posible..... a la acción. Recordad esa frase que os escribía hace unos días en ese célebre post sobre la alegría: "la acción produce transformación, la actividad tan solo consume recursos".
En general, cuando recién conocemos a alguien por quien nos sentimos atraídos ponemos en juego todo nuestro abanico de técnicas de seducción, orientando nuestro comportamiento a conquistar el corazón de la persona elegida.
Si lo logramos, comienza entonces una relación de pareja en la cual, durante el primer tiempo, cuidamos cada detalle y revivimos mentalmente una y otra vez los momentos agradables vividos junto a esa persona. Esto potencia la relación, la nutre y aumenta nuestros deseos de compartir nuestro tiempo con la persona en cuestión.
Al principio, cuando algo nos molesta, solemos dejarlo pasar y preferimos concentrarnos en los recuerdos gratos, pero llega un momento en que la suma de pequeños problemas y desencuentros trae consigo consecuencias que en ocasiones pueden resultar nefastas.
Suele ocurrir entonces que lentamente pasamos de revivir los momentos agradables a rememorar las dificultades.
Es muy útil en estos casos revisar nuestros recuerdos para rescatar intencionalmente aquellos instantes placenteros en que nuestro corazón se aceleró marcadamente sólo con un beso, o algún gesto de amor nos estremeció al punto de dejarnos atónitos.
Esa es la estrategia que usan quienes viven enamorados, se concentran casi exclusivamente en los buenos momentos vividos junto a la persona amada.
Esta forma de proceder, si bien puede ser muy efectiva, entraña un riesgo, y es que igualmente aparecerán las dificultades -ya que forman parte de la vida misma-, y habrá que resolverlas de modo que no afecten a la pareja o lo hagan en el menor grado posible. Para esto, puede ser de gran utilidad reflexionar sobre algunos puntos.
La mayoría de los problemas de pareja pueden ser entendidos como problemas de comunicación, pues es frecuente creer que el otro debería saber lo que necesitamos aún sin que se lo digamos.
Mientras esta creencia persista estaremos condenados a la decepción, esperando algo que probablemente nunca llegará, pero no por falta de comprensión de nuestra pareja, sino porque nunca hicimos el pedido adecuadamente.
Hay ciertas áreas que suelen ser puntos de conflicto, y por ello es conveniente asegurarse de que se haya llegado a un acuerdo satisfactorio para ambos en las mismas.
Estas áreas son: las relaciones con la familia extendida, el equilibrio entre el tiempo compartido y los intereses individuales, la sexualidad.....
Si cada uno puede expresar sus deseos y preocupaciones abierta y honestamente, muchos inconvenientes podrán ser resueltos. Para ello es condición necesaria que ambas partes se escuchen y sean lo suficientemente flexibles como para aceptar el punto de vista del otro, que no tiene por qué coincidir con el propio.
En una relación de pareja no existe el equilibrio perfecto. En nuestras primeras relaciones solemos buscar la complementariedad; es un mecanismo natural - casi instintivo - orientado a formar una familia, a educar unos hijos. El objetivo es más un conjunto lo más completo posible que no una pareja con muchos puntos en común. En segundas relaciones los objetivos suelen cambiar. Se busca mas un otro yo, alguien con quién compartir aficiones, puntos de vista. No por eso es más fácil. Las áreas de conflictos cambian y la comunicación sigue siendo una de las claves de éxito.
Quizás otra de las claves es la de aceptar y llegar a valorar las diferencias como algo que enriquece
Uno de los mayores atractivos de una relación estable radica precisamente es esa posibilidad de evolucionar, de mejorar, de perfeccionar,.... Esta claro que las relaciones ocasionales no pueden cubrir esta área, ya que siempre suponen un volver empezar.
Pero hay algo fundamental: en la pareja, como en muchas otras áreas de la vida, no hay que perder nunca la capacidad de sorprender ni la de sorprenderse ..... La sorpresa es una de las mejores formas de seducir, aunque para poder utilizarla adecuadamente la otra parte debe estar dispuesta a que la sorprendan.
martes, 11 de julio de 2006
LOS PILOTOS DE IBERIA, UNA IMPRESENTABLE CASTA DE PRIVILEGIADOS | ||||
La huelga salvaje protagonizada por los pilotos de Iberia durante siete días ocasionará a la compañía unas pérdidas mínimas de 5 millones de euros diarios y afectará a unos 200.000 pasajeros, según las estimaciones iniciales. No está de más recordar las prerrogativas que disfruta está casta, integrada por 1.800 personas, en gran parte madrileños. El salario medio de estos privilegiados es de 150.000 euros anuales, por 59 horas de trabajo mensuales. La comparación con otras líneas es elocuente. Por poner un ejemplo, los de Iberia vienen a ingresar entre un 80% y un 140% más que sus colegas de la aerolínea de bajo coste Easy-Jet. Otro dado ilustrativo: un piloto que vuele el lunes a la capital colombiana, descansa todo el martes y al día siguiente regresa a Madrid. El resto de la semana lo dedica al sano deporte de no dar golpe. Por supuesto, en Colombia se aloja en un hotel de cinco estrellas, pagado por Iberia. La compañía se encarga de trasladarlo del avión al hotel y viceversa. Al llegar a Barajas, también corre a cargo del transporte hasta su domicilio. Como saben que tienen la paella por el mango, el sindicato que agrupa a estos espabilados presiona a la compañía donde más le duele, con una huelga. Lo paradójico es que esta injustificable medida les saldrá gratis. En caso de conflicto laboral, los pilotos no perciben las dietas y horas de vuelo, pero resulta que por convenio tienen garantizado el cobro de 70 horas mensuales, tanto si las vuelan como si permanecen en tierra. Como quiera que la media no suele superar nunca las 60 horas, pese a no haber trabajado durante la huelga recibirán el sueldo íntegro, menos las dietas. En definitiva, una auténtica tomadura de pelo. Es de recordar que en los años 80 el presidente norteamericano Ronald Reagan tomó una decisión draconiana. En medio de una feroz huelga de los controladores aéreos que vulneraba las leyes vigentes, les propinó un ultimátum y, al no ser atendido, los despidió a todos de un plumazo. Y aquí paz y después gloria. A buen seguro que la dirección de Iberia ha pensado en medidas similares. Lo que nadie sabe a ciencia cierta es si son factibles por nuestros lares celtibéricos. Lo que semeja a todas luces intolerable es que un minúsculo grupo de privilegiados paralice el transporte aéreo de un país y deje tirados a los ciudadanos, justo cuando comienzan sus anheladas vacaciones estivales. |
domingo, 2 de julio de 2006
Desde hace unos días mi post sobre la alegría ha suscitado cierto debate entre mis amistades sobre como debe ser la relación de pareja. Un amigo me envía este escrito:
…dejad que en vuestra unión
crezcan los espacios.
Y dejad que los vientos del
cielo dancen entre vosotros.
Amaos uno a otro, más no
hagáis del amor una prisión.
Mejor es que sea un mar
que meza entre las orillas
de vuestra alma.
Llenaos mutuamente las copas,
pero no bebáis sólo en una.
Compartid vuestro pan, más
no comáis de la misma hogaza.
Cantad y bailad juntos, alegraos,
pero que cada uno de vosotros
conserve la soledad para
retirarse a ella a veces.
Hasta las cuerdas de un laúd
están separadas, aunque vibren
con la misma música.
Ofreced vuestro corazón, pero
no para que se adueñen de él
porque sólo la mano de la vida
puede contener vuestros corazones.
Y permaneced juntos, más no
demasiado juntos:
porque los pilares sostienen
el templo, pero están separados.
Y ni el roble ni el ciprés crecen
el uno a la sombra del otro.
Por Gibran Jalil Gibran poeta, filósofo y artista Libanés del siglo XIX.
Gibran Jalil Gibran plasma en su obra “El profeta” (Edad) su pensamiento sobre cómo debe ser la perfecta relación de pareja.
"Aquello que nos separa debería ser precisamente lo que nos une"